Cronica por Lorenzo
En esta crónica no voy a comenzar
diciendo “todo empieza por la mañana”, ya que para preparar esta
prueba el “todo empieza” se remonta a mucho antes. El sufrimiento
físico y sobre todo mental, empieza con los largos entrenamientos
combinados con la pareja, trabajo, amigos, vacaciones, etc.
Ahora sí, todo comienza el día
anterior a la prueba, cuando empiezo a prepararme, con los nervios a
flor de piel, menos mal que con los WhatsApp de ánimo de los
compañeros me distraigo un poco.
Sábado por la mañana y todo listo,
desayuno bien y quedo con Diego para afrontar Bilbaotriathlon.
Salgo tranquilamente, sobre las
08:45 y llego pronto, a las 10:30, estaciono en el Parking del Arenal
y justo encima “BINGO” el box, la ría, los stans de ORCA, ORBEA,
DORSALES…. Buf que subidón! Ahora sí que estoy nervioso de
verdad.
Llega Diego y desde lejos, con el
desparpajo que le caracteriza, grita “Lorenzo”, recogemos
dorsales y a comenzar la aventura.
A las 11:30 comemos una pasta
exquisita que ha preparado Diego (o eso dice) y al box.
Comentamos los tiempos que
previsiblemente vamos hacer, con el Neopreno puesto y el apoyo de
Isabel nos dirigimos hacia la salida. Hay gente que salta a la ría
medio kilómetro antes de la salida, Diego y yo nos miramos y
decidimos calentar algo menos….
Ya estamos en el agua, con todo
planificado al milímetro, el coco me dice: “Llegó la hora, vamos
a disfrutar de la prueba”, por otro lado Diego me dice “Hazme
caso, ven, que vamos a salir por aquí” tiene razón, salir por el
centro aunque cueste un poco más, permite ir más cómodo sin tanto
animal golpeando por todos los lados.
Suena la bocina y… ¡AL ATAQUE!
1,9 km para disfrutar de mi segmento más fuerte. Para mí supuso un
paseo muy agradable, cuando me quiero dar cuenta estoy llegando al
box (40 min.), sólo recibo golpes en la única curva de giro, tramo
que hago a braza porque hay tapón, aún así, hay personas que
piensan que se puede nadar por encima de la gente… (¡animales!)
Al salir del agua adelanto a mucha
gente que está mareada casi sin poder caminar, me encuentro
fenomenal. Transición lenta en la que me visto y bebo sales. A por
el siguiente segmento. Por cierto, ya tengo dominado salir con las
zapatillas puestas en la bici, la verdad que se corre mucho mejor sin
las calas.
90 km por delante y sigo
encontrándome a pleno rendimiento, el cuentakilómetros marca 40, y
recuerdo los consejos de Joselu y Richard acerca de no cebarme en la
bici que luego se paga, la verdad es que voy muy cómodo y pica hacia
abajo. En este tramo me cruzo con Diego que va como un tiro y nos
intercambiamos ánimos.
Juanma, ¿Recuerdas la frase que nos
dijo Diego en Diciembre?: “La bici es casi llana, tu hazme caso”,
pues de eso me acordé en la primera cuesta, empezaba con un rampón
del quince, para que se te bajen los humos de golpe…. Lo importante
es que me había estudiado todo el recorrido perfectamente y sabía
exactamente la duración de cada una de las subidas. Siguen pasando
los kilómetros y voy bastante bien, recordando lo mal que lo pasé
en el duatlón de Soria, me animó un montón. En cada avituallamiento
como cuanto me apetece, (muy bien organizado, por cierto) hago una
paradita para desalojar liquido, y tras 3 h 30 min llego al box. Otra
cosa que me anima es que me cruzo con mucha gente, por lo que último
no voy ¡¡¡¡mucho!!!!


No me doy cuenta de que tengo al juez de la bandera casi encima y no me da tiempo a descalzarme, me toca hacer todo el pasillo de compensación con las calas, cosa que no me gusta nada. Otra transición lenta, me quito el maillot, me pongo las zapatillas, bebo sales, como y a por la media. Último tramo y sigo en buenas condiciones físicas, cada vez veo más cerca mi objetivo, qué subidón.
Tres vueltas de 7 km!!!, la primera
voy cómodo a 5´-5´30´´, los kilómetros pasan rápido, el
estómago, que en otras ocasiones me ha dado mucha guerra, va bien,
las piernas también ¿Qué más se puede pedir? En esta vuelta bebo
sólo agua y como un plátano. Ya tengo localizado el baño, por si a
caso, y la prueba sigue avanzando.
Entro a por la segunda vuelta, me
anima Isa. Empiezo a flojear un pelín, algún pinchazo en la
rodilla, se carga el isquio, nada que no sea normal después de tanto
tiempo. Lo que sí que hago es pensar únicamente en lo que me queda,
y no en lo que llevo, porque sino… En esta segunda vuelta paro en
los avituallamientos tranquilo, también en el baño, y la gente
acompañando con las palabras de aliento.

Última vuelta, ahora sí que voy cansado, los ritmos me bajan a 6´-7´, pero sigo comiendo kilómetros poco a poco. Físicamente no estoy mal, pero mentalmente estoy muy saturado, cansado, se me hace eterno, pero estoy en los últimos 4 km. Cuando me paro un poco la gente me anima tanto que no me deja la conciencia, continuo. Voy vacío de energía y en el último avituallamiento me tomo un gel, me provoca algún extraño en el estomago pero los kilómetros siguen pasando. Sigo pensando en lo poco que me queda, pero que cansado voy… y aparece el kilómetro 20 marcado, madre mía!! Ya casi estoy, no me queda nada. Entro en los últimos metros y con toda la gente volcada subo el ritmo casi sin querer, me animan mis amigos Marta e Isusko en la llegada, giro la última curva y veo de fondo el cartel con 06:10, exactamente igual que cuando veo los videos de motivación en internet, pero esta vez es de verdad para mi, madre mía, no tengo palabras para describir las sensaciones, justo en la meta hay una rampita para que veas desde bien arriba que has llegado a la meta, me emociono mucho, pero si se me saltan las lágrimas y una chica encima me coloca una medalla, ¡¡¡Qué felicidad!!!
Ya vienen todos Marta, Isuko, Isa, Diego, nos hacemos fotos, contamos anécdotas, y de nuevo, QUE-CONTENTO-ESTOY. Tanto tiempo entrenado, tanto tiempo esperando la prueba y tanto tiempo dudando de si sería capaz de acabar.
Recogemos todo, cogemos una cocacola
y un bocata y directos a la zona de masajes, aunque nos toca esperar
un poquito merece la pena.
Finalmente Diego acaba 384 con
5:56:22 y yo consigo terminar 413 con 6:10:51. Ahora mismo pensando
en el sufrimiento de la media, no me quedan ganas de repetir, pero
seguramente el próximo año regrese.
Prueba totalmente recomendable, muy
bien organizada
Esta prueba se la dedico a todos mis
seres queridos y compañeros